El aborto es un derecho que engloba el cuerpo, la libertad de acción, el derecho individual..., la vida al completo de una individua.
Resistimos a vuestros ataques, a vuestro terrorismo biopolítico, a vuestra impertinente insistencia a meteros en nuestros cuerpos y en nuestras vidas. Resistimos a la imposición de la maternidad. Resistimos a la violencia institucional de todos los ministerios, a la leyes y pseudoargumentos que nos criminalizan. Porque creemos en nuestra capacidad decisiva y en la posesión de nuestros cuerpos y sexualidades.
Follamos en vuestras sedes, abortamos en las Iglesias y bailamos en las Catedrales. Mi cuerpo; mi templo. Si os metéis en él, entramos en los vuestros.
Seguiremos abortando, haya la legislación que haya, gobierne quien gobierne, independientemente de quien lo haga en la luz o en la sombra.
Restringir el aborto no implica menos abortos; significa más peligro para la salud de las mujeres. Iglesia y Estado represores, que sorbéis de la misma pila: os beberéis la sangre de nuestros abortos.
[Fdo: AberturaVaginal]
[Mi cuerpo. Mi sangre. Mi templo... PLAY]