viernes, 5 de agosto de 2011

¡Cuidado con los perros!

Grecia está construyendo una barrera en la frontera con Turquía con el objetivo de frenar la inmigración que nuestros medios de comunicación llaman "ilegal", en este caso, procedente de Turquía. La novedad de esta barrera radica en que es un foso y no una valla, artilugio con el que nos tenían acostumbrados hasta ahora nuestros fasci-Estados, tan amigos de la propiedad privada. El proyecto griego contempla una brecha de 120 kilómetros de longitud, 30 metros de ancho y 7 de profundidad. Al día de hoy ya se han cavado 14,5 kilómetros de tierra.

Las fronteras son simples líneas en los mapas, que separan Estados que suelen pintarse de diferentes colores, y que sirven, sobre todo, para que los niños de cada lugar, cuando estudian los mapas políticos en sus escuelas, tengan claro cuál es la porción de tierra que corresponde a su nacionalidad. Los inmigrantes, siempre torpes en la teoría, no saben de fronteras y se hace preciso, entonces, remarcar a lo grande esas simples líneas.

Con el paso de los años, los occidentales, habitantes del tedio y del miedo, nos hemos especializado en levantar vallas. El fin es obvio: que los inmigrantes se estampen en ellas, de la misma forma que lo hacen los insectos contra los parabrisas de nuestros coches, en los viajes nocturnos, que vienen buscando las luces de la ficción y terminan felizmente aniquilados en nuestros cristales, nítidos y documentales. 

Tres ejemplos de vallas occidentales son la de España con Marruecos, la de Israel con Cisjordania y la de Estados Unidos de Norteamérica con México. Las tres guardan varias similitudes, tanto en la naturaleza coercitiva y disuasoria como en su capacidad de separar identidades culturales e identitarias diferentes. Este modo occidental de acoger lo diferente se llama nacionalismo extremo, un adjetivo que nuestros medios de comunicación no suelen gastar, como bien sabemos todos.

Estas vallas también comparten otra característica común, y que las iguala a otras tantas vallas fronterizas repartidas por el mundo libre occidental: su inutilidad. Las vallas no frenan el fenómeno inmigratorio, porque la necesidad y la esperanza son armas contra las que el capricho y el aburrimiento no tienen nada que hacer.

Ahora Grecia, que transita por su segundo rescate financiero, se apunta a la moda, y excava su brecha con Turquía, un Estado que a medio o largo plazo podría incorporarse a la Unión Europea, a no ser que a corto plazo [y lleva camino de ellos] la Unión Europea se desintegre...

Otro modelo de valla, no olvidemos, es el danés. Dinamarca ha restablecido los controles fronterizos, pulverizando el Tratado de Schengen.

Todas estas vallas han surgido al tiempo [y como consecuencia, quizás, de] que la ultra-derecha, con su discurso xenófobo, avanza posiciones en buena parte de los países europeos; y que los tiburones especuladores están a punto de comenzar su segunda gran oleada de ataques contra otros Estados europeos [España e Italia, de momento], después de haber engullido a Grecia, Irlanda y Portugal.

Recordemos que después del crack bursátil de 1929 se decía que, con el auge de los nacional-socialismos, un fantasma recorría Europa. ¿Se estarán germinando ahora, de nuevo, esas ideologías duras? ¿Estarán de vuelta los viejos fantasmas? En los mismos colegios donde nos enseñaron las fronteras que separan a los países en diferentes colores también nos contaron que los pueblos que no conocen su historia están condenados a repetirla, y quizás dejaron la lección ahí porque es muy duro transmitir a los más pequeños que los pueblos que sí la conocen [su historia], siguen estando condenados a repetirla, acaso de formas más cruentas...

Pero no hay que preocuparse... De momento estamos a la espera de acontecimientos, un tanto nerviosos, balanceándonos en las hamacas de nuestros porches. Nuestras casas están seguras dentro de los vallados, mientras mantenemos el rifle empuñado, y eso nos traquiliza lo suficiente. Además, por si acaso, hemos puesto el cartel ¡cuidado con los perros!. 

Y nuestros perros, hasta hace nada, solamente ladraban, pero ahora muerden al menor descuido. Saludos, Breivik.

26 comentarios:

Blue dijo...

Sí a todo.
Aunque...jajaja...cuando nos dicen que el fantasma viene por un sitio suele ocurrir que no. Lo digo porque tengo la sensación muchas veces de que cuando avisan de que viene por babor acabo sintiendo una dentellada por estribor. Algo falla.
De momento en casa estamos seguros pero hay tantos llamamientos a la calma que acaba uno por ponerse nervioso.

Musutxuak, Kez.

(Te lo juro, palabra de verificación: perreo, ja, ja)

Desclasado dijo...

Hola, te he visto en chez Marcela, chez Blue... y me he venido a leerte.

¿Donde está la barrera entre la xenofobia y la gilipollez? La mayoría de estos análisis desprenden un buenismo ideal, lamentablemente el mundo no es ideal. Dejar entrar a todos los inmigrantes que se quieran venir, es sencillamente colapsar un país. Date una vuelta por Salt, Cataluña, y después de un baño de realidad cuantas lo del mundo idílico sin fronteras. Por no hablar de zonas de Londres donde se está aplicando la sharia, aunque esto último lo sé de "leídas".
La inmigración desbocada es un instrumento al servicio del capital para abaratar sueldos y crear descomposición social: observa que ambos gobiernos, pepesoe, la han promovido y alentado. A estas alturas de la película, recurrir a los mantras del capital(racismo, xenofobia, machismo, etc) para seguir actuando de la misma manera, es algo que ya no suele colar.
Puestos ser bueno, dormir muy bien y eso, prefiero hacer el órdago a lo grande: construyamos un mundo donde no haya necesidad de emigrar, que el que lo haga sea por puro aventurerismo. ¿Por qué conformarse con la caridad de "dejarles venir" pudiendo apostar por la dignidad en sus vidas?
Estos "parches"progresistas tienen más peligro que un mono con una escopeta y al final, en términos marxistas, acaban siendo el "tonto útil" del capital.
Los fascismos los traen democracias corruptas.

Saludos. Como no nos conocemos mi tono puede parecerte "duro": nada de eso, sencillamente discrepo de tu opinión en este tema. Intento ver más allá de la cantinela facha/progre.
Y no: no tengo nada contra el inmigrante, si esto sigue así es muy posible que yo mismo sea uno de ellos, tengo contra el sistema que genera la inmigración.

Kez dijo...

Blue, la cosa es que el fantasma no se ha ido nunca. El cuento era que se había ido [muerto el perro, acabada la rabia] pero no...

Perreo, perro, jajaja,

Musutxuak, Blue,

F.A. Giovanni dijo...

Ahá. Yo iba a contestar como Desclasado, sólo que en plan irónico, arguyendo que el muro de Cisjordania está ahí para combatir el terrorismo y que la nueva frontera de varios metros de altura entre EEUU y México para evitar la "saturación". Hay que ser pragmáticos, ¿no? Eso, sigamos a Maquiavelo y sustituyamos el inútil "lo que debe ser" por el "lo que es (en realidad)".
Actualmente suelo estar alerta ante los mensajes que dicen ser pragmáticos; pecan de plantear un problema y ofrecer dos alternativas pintando una (la que les favorece) como práctica y plausible y otra (la que no se ajusta a su credo) como indeseable, que va contra nosotros mismos, etc.
Ay, cuan saludable resulta en esos casos percatarse de que la formulación de un problema así llevada a cabo y de que las respuestas que se proponen jamás nacen de la imparcialidad, sino de los intereses o bien de la estrechez de miras.
Con el tema de los inmigrantes ocurre que algunos portan la bandera del "o nosotros o ellos (en este país no cabemos todos)", o sea, un "este es el problema y estas son las dos únicas soluciones posibles"; y claro, ante un interrogante así, uno piensa en sus padres o en su novia, todos ellos españoles y contesta: nosotros primero. Yo soy más de mandar a la mierda a alguien que me venga con esa falacia en forma de pregunta.
Sorry for el tocho. Muy certeras tus palabras, Kez, como siempre.

Kez dijo...

Hola Desclasado, te tengo cierto respeto porque también te tengo leído, sobre todo en Casa Blue. Para ser tu primer comentario aquí, has sido contundente, y claro. Eso me gusta y me asusta a partes iguales. Discrepemos, entonces...

Lo dicho en la entrada, escrito ha quedado. No hay en ella una apología a un mundo sin fronteras [las líneas imaginarias que dividen a los ciudadanos de los estados] sino una crítica a un mundo con muros. Son dos conceptos diferentes.

Creo que tu "preocupación" principal sobre el fenómeno migratorio reside en lo que solamente apuntas de "leídas" [la religión] y, sobre todo, en lo que no dices [la cultura].

Tu discurso ["colapsar un país", "inmigración desbocada", "descomposición social", etcétera] te retrata, aunque coloques a los migrantes como herramientas de un sistema que juega con ellos para "putearnos" a nosotros.



Comparto contigo el objeto de una crítica [el PPSOE], pero es evidente que tu la abordas desde la derecha ideológica y yo no, y créeme, no estoy hablando de la diálectica facha-progre... Solamente que yo sí creo que siga existiendo una derecha y una izquierda ideológicas, y que, esa derecha lleva años vapuleando a la izquierda, independientemente de los partidos que estén en el poder y la "sensibilidad" que tengan. La inmigración como problema es un discurso de la derecha ideológica, y ambos partidos, el progre con su ambiguedad histórica, y el conservador, de forma más directa, asumen ese discurso como propio. ¿Quién y cómo se inyecta el miedo al diferente?

A decir verdad, en este asunto no sé quien acabará siendo el "tonto útil" del capital [el capital, otro objeto de crítica en el que quizás también haya cierta sintonía], pero no creo que los fascismos los traigan las democarcias corruptas, porque, como he dicho más arriba a Blue, el fascismo nunca ha dejado de estar con nosotros. De hecho, cada uno de nosotros albergamos un fascista dentro. Lo hemos mamado, porque estamos llenos de "cocos" desde la infancia. A la educación por el miedo, ¿te suena?

En fin, tu turno... jajaja,

Un saludo,

F.A. Giovanni dijo...

Oups, yo mejor salgo del campo de batalla. Sólo quiero decir, para sintetizar lo dicho por moi, que el pragmátismo -al que se ha hecho referencia aquí- es una forma de ideología cuya peculiaridad reside en que la ideología se disfraza de neutral.
(De eso ya se ha hablado aquí veces, i know)
Bona nit =D

Kez dijo...

Jajaja Dani, no te retires, que solamente es munición de fogueo. Aunque, eso sí, temo la respuesta de Desclasado, porque suele ser contundente y directo. Y es de agradeder, aunque haga "pupa"...

Sobre lo que dices del pragmatismo, sí, hace poco lo hablamos por aquí...

Gabon, Dani [Ah, otra cosa, todos hemos tenido a una "Maite" en la juventud ;op]

Desclasado dijo...

Gracias por el recibimiento.
Nooo, jajaja, no te asustes que no hay caso.
Sigamos pues.

Sería muy raro que yo abordase algo desde la derecha ideológica, más bien será que algunas de las cosas que digo también las dice la derecha, al igual que otras las dice la izquierda. Y esto si supiésemos qué demonios hoy día es la izquierda y la derecha... Que no es fácil saberlo, parece que lleven los papeles cambiados.
Suele pasar que quien me mira desde la izquierda me vea de derechas y al contrario. En realidad soy bastante anarquista y de lo demás pico de aquí y de allá.

A mí tampoco me gustan los muros, y además no sirven para nada. Mi preocupación sobre el tema migratorio desbocado, tal y como se ha estado estimulando en este país, la he dejado bastante clara: descomposición social, bajada generalizada de sueldos, colapso de servicios... Todas esas cosas que quien vive en un pueblo pequeño con tasas de inmigración de más del 10% ve, conoce, y sabe de sobra. ¿Y a quién beneficia todo esto? Ni al obrero inmigrante ni al autóctono, eso está claro. El culpable siempre es el asesino y al que beneficia esto es al capital, esto es transparente.

Plantea el amigo Dani que el pragmatismo es una forma de ideología que se disfraza de neutral. Hombre, no sé... Eso será cuando el pragmatismo busca un objetivo y dice querer otro, eso aunque sea muy pragmático es un engaño. Sin partir del engaño, para todo hay que tener una actitud pragmática, lo contrario, las bellas e irrealizables teorías, no son más que darte de coscorrones contra la realidad constantemente.
Entonces aquí llegamos a dos posibles vías con una tercera intermedia:
1- No dejar entrar a nadie (postura típica de los partidos en el arco de la extrema derecha).
2- Dejar entrar a todo el que quiera venir (postura de la izquierda en general, el capital y la derecha "centrista" -jua jua- que no lo dice pero lo hace).
3- Postura intermedia: dejar entrar a los que hagan falta con contrato de trabajo y billete pagado de vuelta si acaban contrato y pasa x tiempo sin encontrar nuevo trabajo). Y dentro de ese los que haga falta, preferencia por los más culturalmente afines, que van a dar menos problemas de integración.

Yo abogo por la 3, claro, sobra decirlo.
La postura facha me parece un sin sentido, un porque sí, y un estimular odios tontos como cortina de humo que tape su absoluta falta de proyecto en cualquier ámbito.
La postura progre me parecen los mundos de Yuppi, que es todo tan bonito y todos nos queremos tanto que vamos a ser muy felices. Y luego se montan unos guetos que pa qué...

Del fascismo hablamos todos tanto que ya no se sabe muy bien ni qué es. Supongo que sí, que te capto y que tienes razón: llevamos un fascista dentro, lo vi cuando el linchamiento social de los controladores por parte de las masas.
Pero a los fascismos los traen democracias corruptas, eso es bastante trasparente. Para llegar a un acuerdo borro "los traen" y lo dejo en "los despiertan".
La gente no está viviendo bien, con buenas condiciones de vida, con confianza en el futuro y gobernantes justos, se levanta un día y dicen: "oye, que nos vamos a hacer fascistas y nos dedicamos a desfilar y a matar gitanos y eso..."
No, no funciona así. Funciona que la situación está tan podrida que la gente invoca, aplaude al salvapatrias que pone orden. Ese suele ser el camino natural de despertar a la bestia.

Saludos. Un placer.

Desclasado dijo...

Ah, escribimos a la vez, no te había leído, jajaja.
No, hombre, Dani, no hay que retirarse.

Kez dijo...

Interesante lo que dices, Desclasado. Mañana te respondo... [el día se me ha acabado por hoy].

Adelanto que de las 3 opciones que planteas, la 1 y la 3 me parecen fachas, y la que tu llamas progre no existe. Hasta ahí puedo leer...

Buenoooo,

Desclasado dijo...

(Anoche no me permitió escribir para despedirme, no sé qué ocurría con el blogger)

"...y la que tu llamas progre no existe."

Je...Tendría que presentarte a algunas amistades mías... No sólo piden que venga quien quiera, sino que además exigen que se construyan centros de acogida para ellos, para que puedan "vivir con dignidad". Hay otros mundos y están en este.

F.A. Giovanni dijo...

xD Aquí otra incursión del menda. La palabra "pragmatismo" tiene muchas acepciones, y yo me he quedado -desde una perspectiva en busca de lo sospechoso- con la de ideología que se disfraza de neutralidad. Y creo que me has puesto el ejemplo en bandeja, Desclasado. Me explico: ante una problemática (la inmigración) has ofrecido dos opciones (antes de comentar las tres vías): actitud pragmática o utopismo. Claro, planteado así, es lógico responder que preferimos la actitud pragmática, puesto que la otra, por su naturaleza, es irrealizable. Ahí es donde la ideología -que etiqueta de intransitables otros senderos-, mediante ese planteamiento tan determinista, ha querido asumir un esquema imparcial.
Las tres vías que citas, aunque parezcan ser razonables, evidencian una visión local por tu parte de la cuestión migratoria; o sea, reflexionas sobre las respuestas que debemos dar en lo que respecta a nuestras fronteras. No obstante, el problema va más allá, tiene un origen extra-continental, y es ahí donde precisan ponerse en práctica las soluciones.
Rayos, espero haberme explicado.
Saludos jevrybody.

F.A. Giovanni dijo...

Ah, Kez, que se me olvidaba preguntarte: ¿es posible poner este blog bajo el sistema de seguimiento de blogger?

Desclasado dijo...

Sí, claro que te explicas, Dani. Empiezo por el final: de lo primero que dije es que puestos a ser buenos hagamos un mundo donde no haga falta emigrar.
Vale, en eso estaremos todos de acuerdo.
Pero mientras hacemos ese mundo, ¿qué hacemos con el problema ya en nuestros morros?
Por supuesto que evidencio el problema a nivel local, ni sé ni quiero ver el problema desde una perspectiva neozelandesa, por ejemplo, porque no tengo ni idea de qué pasa allí, e incluso lo válido allí puede no servir aquí.

Siguiendo con el juego de palabras: lo pragmático es ser utópico, nada avanzó nunca sin utopías a las que perseguir. Pero de ahí a quedarse en distorsiones de la realidad y pretender modificar la realidad para que encaje en una utopía determinada...

Es una especie de " la gente va a ser feliz en un multiculturalismo inter-racial y todos se van a respetar".
Revueltas constantes de barrios gueto, creación de movimientos racistas, odios enconados, no integración incluso en la tercera o cuarta generación...
Resulta que esa utopía hoy por hoy y de la manera que se lleva a cabo, no funciona. Pero podemos seguir echándole la culpa a la xenofobia o a cualquier fantasma que inventemos.
Todo menos decir: nos hemos equivocado, esto no rula, habrá que mirar por otro camino.

Kez dijo...

Empiezo con tres testimonios personales y en el siguiente mensaje me pongo al tema:

Uno. Conocí a Joseph en una empresa de madera. Fuimos pareja de apilamiento de listones varias veces. Los dos obreros; con el mismo sueldo; y el mismo trabajo. Joseph todavía hablaba castellano de forma torpe y atropellada, cuando me pidió que le ayudara a hacer su reagrupación familiar: porque no sabía qué papeleo tenía qué hacer y cómo le recibirían las instituciones ante su petición. Le ayudé; fue un larguísimo proceso de examen, de miramientos con lupa a domicilio, nómina, contratos y demás. Finalmente llegaron su mujer Omorowa y su hijo Tony.

Ahora, 4 años después de aquello, seguimos siendo amigos. Un día le pregunté: ¿Por qué saliste de Nigeria? Lo primero que dijo, la corrupción de su país; después ya habló de las pocas oportunidades y los escasos sueldos que conllevan una vida miserable. Tiempo más tarde me dijo que en su casa tenían armas porque los pillajes abundaban.

Hace 2 años, después de estar 3 meses en paro, Joseph estuvo a punto de irse a Londres. ¿Por qué? Porque no había salido de Bennin City para estar en casa. Al poco encontró trabajo de carretillero en la Michelín, y allí sigue, de momento.

Dos. Wasim y mi hijo son compañeros de clase. Suelo hablar con su padre marroquí. Un día, en el parque, mientras nuestros hijos jugaban, yo le dije: "mi abuelo estuvo en la guerra de Marruecos, matando marroquís"; él me contesto: "mi abuelo estuvo en la guerra de marruecos, matando españoles". Sonreímos.

Quieren abrir una mezquita en una calle de Zaramaga, un barrio obrero de aquí, donde vivo, en Vitoria-Gasteiz. Ha habido protestas de vecinos, manifestaciones en contra de la apertura, han aparecido pintadas nazis e, incluso, un día esparcieron trozos y sangre de cerdo en la puerta del local donde quieren abrir la mezquita. Un día le pregunté; los vecinos no quieren una mezquita ahí, dicen que hacéis mucho ruido. Él me contesto que rezando no hacen ruido, pero que muchos tienen la manía de quedarse en la puerta después de las oraciones. "Es normal que los vecinos se quejen", concluyó.

También le pregunté un día por qué había venido a Gasteiz. También habló de corrupción y de buscar un futuro mejor para sus hijos. Él ahora está en paro; se mantienen a flote porque su mujer trabaja.

Tres. Los padres de Naiara son ecuatorianos. Naiara y mi hijo se han hecho amigos jugando en los parques. Los padres de Naiara han decidido que, después de 6 años en España, regresan a Ecuador. La madre ha trabajado en mil sitios, pero el padre no ha trabajado en nada desde que llegó. ¿Por qué se van? Porque les han dicho que el nuevo gobierno está dando créditos blandos para favorecer los pequeños negocios.

[sigo en otro mensaje...]

Kez dijo...

Me apetecía citar esos casos personales para que compruebes, Desclasado, que vivo en el mismo mundo que tú [que en mensajes anteriores me instabas a que me diera vueltas por los guetos inmigratorios...] Vivo en el centro de Gasteiz; y en el colegio del barrio hay un 75% de niños procedentes de familias inmigrantes. Lo ideal es que el porcentaje se equiparara al social (7-10%) pero no ocurre, porque efectivamente, la estructura empuja a la creación de guetos. Y unos y otros somos responsables de esa guetización...

A lo que voy es que hay diferentes formas de vivir el proceso migratorio de otros. Por supuesto que conflictos no faltan, pero en fin, de equilibrados está el cementerio lleno. Quiero decir que la existencia es conflicto; lo demás, mundos de yuppie, que también has empleado...

No entiendo [o sí] que se perciba esa situación que describes [en tu ejemplo extremo de "descomposición social"] como caótica, como sucia y como perjudicial tanto para ellos como para nosotros. Su presencia aquí está movida por unos hilos que aquí no disfrutamos ni en sueños...

Luego viene el tema de la regulación. Y aquí volvemos al punto en el que me quedé anoche. El cansancio me empujó a calificar las posturas 1 y 3 de fachas, cuando quería decir conservadoras. Sobre la 2, dices que conoces gente que..., bueno, pueden pensarlo, pero es una política que ningún Estado ha aplicado, porque no habría Estado si no se regulase la llegada de la inmigración. Otra cosa es la inmigración que los medios llaman "irregular", que hay que contar con ella como variable indeterminada, pero siempre más baja que la "regular".

La 1 tampoco tiene lugar... ¿Por qué? Porque es más rentable la 3, la tuya, que es la que se da en todos los Estados occidentales, en diferentes grados. La tuya asume a los inmigrantes como meros sujetos productores... No sé si será "progre" asumir a los inmigrantes, antes como personas que como manos de obra...

En el punto 3 es donde, de forma secundaria, añades lo que realmente importa, lo que os quema y abrasa a muchos: la integración cultural y los "problemas" que dan aquellos que no se integran como deberían hacerlo.

Atacas a la multiculturalidad. Te advierto que no sé muy bien qué es eso, y que me parece una modernez vacía de contenido. Yo quizás sea más relativista y pregunto: ¿En qué consiste esa integración? ¿Estamos hablando de que deberían dejarse asimilar por la cultura dominante,la nuestra? Porque yo no tengo en contra nada de las culturas ajenas, siempre y cuando respeten el código penal común a ellos y nosotros que, en este caso, es el de España.

Me dejo cosas..., pero déjame repasar tus mensajes y recopilar información...

Un saludo, Desclasado. Un placer la discrepancia,

Kez dijo...

Dani, sobre tu pregunta si es posible poner este blog bajo el sistema de seguimiento de blogger, ni idea. Sé que tengo algunos seguidores, pero no sé cómo es el sistema. Te puedes suscribir arriba a la derecha, pero no es lo mismo, claro.

Blue y/o Desclasado, más puestos en asuntos blogueros, seguro que saben...

Desclasado dijo...

Pregúntale a Blue si viene por aquí, Dani, que yo estoy muy verde en esos temas.

Kez: no nos vayamos tan lejos,quedémonos en casa: mi abuelo salió del pueblo para buscarse la vida. Se la buscó/ganó en una ciudad. Sus hijos se casaron/cruzaron con otros hijos de - muy posiblemente- inmigrantes. Nací yo, que si esto sigue así me convertiré en otro inmigrante.
Las migraciones humanas son naturales.
Pero... me debato entre ser "muy bueno" y decir: "Oh, que vengan cuantos quieran", o pensar: "Aquí hay gato encerrado, esto no es normal".
Ni Wilson, ni Mojamé, ni Dimitri tienen culpa de esto. Meros peones en un tablero que les sobrepasa. Pero para mí es clarísimo que en la actualidad el capital usa las migraciones como fuerza de descomposición social. Y los progres, alabando la inmigración, le hacen la cama al capital, como en tantos otros temas.
Tengo problemas para comentar en tu blog, la mitad de veces no me deja. Lo digo por si no respondo.

Kez dijo...

Desclasado, yo hablo desde el aquí; además, mi historia personal es muy similar a la tuya, hijo de personas que emigraron de los pueblos a las grandes ciudades allá por los años 60 y 70.

Creo que te haces trampa a ti mismo aplicándote la disyuntuva discursiva que planteas. Wilson, Mohamed, Dimitri, etcétera sí, pueden ser peones de un tablero que los sobrepasa, pero nosotros también lo somos, estamos en el mismo tablero, tan sobrepasados como ellos. Aquí entra lo que yo llamo solidaridad entre iguales, que no creo, ni de lejos, que sea un asunto progre...

Podría conectar contigo en eso que cuentas de que el capital descompone, pero lo hace con y sin inmigración. La unidad-patrón, su grasilla, es la desigualdad social, así que, haya o no inmigrantes, que haya muchos o que haya pocos, no nos va a librar de eso que tu llamas "descomposición social". Continuamente se abren brechas por las que se cuelan esas "descomposiciones"...

No obstante, creo que hay cierta lógica perversa en tu defensa a los inmigrantes-victimas-del-capital al tiempo que defiendes regulaciones validadas por ese mismo capital que atacas.

[Sobre los problemas para comentar, ni idea. Nadie me lo había dicho antes. Y juro que no es cosa mía, jeje]

Un saludo,

Desclasado dijo...

No he dicho yo que a nosotros, no inmigrantes de momento, no nos sobrepase la película.
Pero que se usa la inmigración como fuerza de choque no me lo quita nadie de la cabeza: constantemente veo a la banca, gobiernos y FMI alabando la inmigración.
En esa descomposición social la inmigración descontrolada acelera el proceso.
Coño, Kez, jaja, las medidas que yo propongo no son para que las aplique el capital, ni de coña lo van a hacer; son para si alguna vez volvemos a tener un estado que trabaje para los ciudadanos.

Ya, hombre, nunca pensé que tú tuvieras que ver con lo de no poder comentar.

Me voy a dormir. Gabon que decís por aquí.

Blue dijo...

Asunto técnico. A la pregunta de Dani de si es posible poner este blog bajo seguimiento, supongo que se refiere al google reader. Para eso tiene que poner Kez el gadget de seguidores.
La otra solución es la que ya hay, inscribirse por correo.
Eso hasta donde sé yo. No sé si habrá otras alternativas.
Respecto al tema X no digo nada pero os leo atentamente, ja, ja. Tema sensible y complejo.
Boas noites.

Kez dijo...

No termino de entrar en tu lógica, Desclasado, no termino de entenderla ni siquiera un poco, por lo menos... ¿Tu ideología es también producto de ese Capital? ¿Y la mía? Supongamos que yo soy progre y tu eres facha..., ¿seríamos una construcción interesada del Capital para que entráramos en conflicto? ¿Sería, en ese caso, el capital, responsable de la "descomposicón intelectual" surgida de nuestro desencuentro? ¿Qué le pertenece al capital y qué nos pertenece a nosostros? ¿Cuál es el discurso del capital? ¿Es único o se puede usar como expendedor de discursos al gusto del consumidor? No sé. Algo no me cuadra...

Volveremos a encontrarnos, jeje. Ahora es a mi al que le toca irse a dormir. Un saludo,

Desclasado dijo...

Trataré de explicarlo de forma sencilla y directa para que entiendas mi lógica, independientemente de que la compartas. Yo puedo estar equivocado.

Es sabido desde Roma, quizá antes pero Roma lo sintetizó, que "divide et impera".
Que ahora hay quien impera esta fuera de toda duda: los que tienen la pasta.
Que la lección romana siempre da resultados es también sabido.
Así que para que no carguemos contra los de arriba nos dividen a los de abajo. Facha/progre, hombre/mujer, moro/cristiano, etc, siempre enfrentados entre ellos en vez de unidos contra ellos, contra los de arriba.
Como el ser humano es gregario y necesita de la aceptación del grupo esto les funciona de maravilla.
Así que hay quien carga contra el inmigrante en vez de cargar contra el sistema que genera esa inmigración. Hay quien carga a favor de esa inmigración en vez de cargar contra el sistema que la genera.
Ambos creen estar encuadrados en "los buenos", ambos te darán mil razones (más bien sentimientos) del porqué de su dirección. Y ambos estarán haciéndole el caldo al impera al no cargar contra quien genera esta situación.
Las reglas del juego que los han puesto son en blanco y negro:
- Criticas a la inmigración: eres racista. Y si es al revés eres un lilas que no se entera.
- Crees que se está promoviendo el enfrentamiento mujeres contra hombres: es machista y si es al revés eres feminazi.
- Eres muticultural: criticas al cristianismo y callas con el Islam. Y si es al revés eres poco menos que un remedo de Santiago matamoros.
He puesto estos tres ejemplos como eso, como ejemplo, podría seguir con el Madrid-Barça y hasta el infinito.
Hay vida fuera del blanco y negro.

A ver si así me pillas...

Y partiendo de esta base: la inmigración desbordada es inasumible para cualquier país y cargar contra el inmigrante es desahogar las frustraciones con el más débil.
Hay vida fuera del blanco y negro.

Pd: ya no tengo ningún problema en escribir en tu blog.

Desclasado dijo...

Y por último: yo he dejado claro aquí y ahora qué es lo que propongo, regulación de la inmigración, no el desborde actual, y que es lo que quisiera para un futuro: que no hiciese falta emigrar. He señalado también al culpable.
¿Qué propones tú?

Y si quieres vamos dejando ya esto; veo que has hecho entradas nuevas y las posturas parecen claras.

Kez dijo...

Desclasado, estoy en el trabajo. Y este fin de semana voy a estar desconectado. En cuanto vuelva, volvemos al tema. Además, ya veo que has abierto otro frente con el texto de Manuel Delgado. Eses insaciable, jajaja,

Intentaré responder a la pregunta "¿qué propones tú?"

Un saludo,

Kez dijo...

No me olvido Desclasado. El cansancio aprieta pero no ahoga... así que otro día.

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